17/5/08

De mudanza

Me mudo, seguiré próximamente en:












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27/8/07

Capítulo 7

La ciudad era el punto civilizado más antiguo del planeta, el centro de gobierno y dirigía todos los demás puntos de población. Se podía decir que era la capital del planeta.

En un principio el planeta, fue descubierto por casualidad, en un sistema remoto sólo visible desde la Tierra cada quinientos años. Los telescopios más potentes revelaron que el sistema era muy simple: un pequeño sol, dos planetas girando a su alrededor, de los cuales uno de ellos estaba rodeado por tres satélites. Éste en concreto tenía agua y vegetación, lo que suponía un gran filón en la exploración del universo.

El descubrimiento fue guardado en secreto al resto del mundo, tal y como estaba entonces en el plano político y ecológico mundial, cualquier posible nuevo planeta habitable para el ser humano suponía una amenaza para la nación que lo anunciara y por tanto lo reclamara.

Afortunadamente, los viajes espaciales habían experimentado un gran desarrollo, especialmente en este país concreto, su pequeño tamaño y riqueza propició que los incentivos y fondos fueran destinados a I+D llegado cierto momento. Los expertos calcularon que al ritmo al que iba el mundo, en cien años los recursos no darían soporte a toda la humanidad.

Entonces estalló, el frágil equilibrio mundial se rompió, y esta pequeña nación tuvo que tomar una decisión: lo que en un principio iba a ser un viaje rutinario de exploración e investigación, pasó a ser un éxodo multitudinario de prácticamente toda la población de este lugar. En el plazo de un año tenían todo listo para partir y decirle definitivamente adiós a la Tierra.

Una única nave atravesó la atmósfera alejándose de la masacre que dejaba atrás, aquel planeta verde y azul alguna vez en el pasado, fue convirtiéndose a ojos vista en un planeta moribundo y enfermo. Grandes círculos debidos a explosiones de todo tipo se dibujaron en las ciudades más importantes del mundo. Los que apretaban los botones de las bombas estaban tan obcecados en destruir el suelo que no vieron la última nave que abandonaba la Tierra antes del apocalipsis.

En la nave, se produjo un llanto colectivo por el horror que dejaban detrás, especialmente en aquellos con el valor suficiente como para atreverse a mirar aquella masacre.

Fue un largo viaje, a bordo de la nave había nacido una generación completa, la esperanza de la humanidad.

26/8/07

Capítulo 6

En la Sala del Concilio crecía la tensión por momentos, especialmente después de la pérdida del contacto con la última patrulla enviada: simplemente desapareció de los radares.

Una gran preocupación se reflejaba en todos y cada uno de los miembros, especialmente en la más anciana de los diez. Era una de los primeros pobladores, una de los pocos que quedaban vivos todavía, y además de ser consciente del posible peligro que corría el planeta, estaba especialmente preocupada por su nieta, la cual había salido de acampada. Tenía que intentar localizarla cuanto antes, pero en ese momento había que tomar decisiones con respecto a la forma de actuar ante el fin de las transmisiones.

"Debemos enviar los transportes terrestres" - dijo al fin.

El gesto de los demás miembros cambió, estaban sorprendidos ante aquella opción. Aquellos vehículos habían dejado de utilizarse hacía varias décadas, quedaron obsoletos en el mismo momento en el que el transporte aéreo basado en el magnetismo del planeta fue desarrollado. Era totalmente silencioso, económico y nada contaminante.

Pero vista la situación, no tenían muchas otras alternativas, parecía que los repetidores de frecuencia también habían fallado y sin las plataformas de documentación ni repetidores carecían de información.

La anciana tenía una expresión decidida reflejada en su cara. Levantó la vista y miró a los demás para someter la propuesta a votación.

"¿Están de acuerdo?" - preguntó.

La decisión fue unánime: enviarían los vehículos terrestres.

El portavoz salió de la Sala a comunicar la orden, y la anciana fue detrás de él fuera, tenía que intentar localizar a su nieta.

24/8/07

Capítulo 5

Una de las últimas patrullas empezó a descender lentamente, las otras plataformas se habían deslizado ligeramente sobre la superficie cristalizada, debido a su irregularidad. Aún quedaban dos más en el aire, las de documentación.

"Mirad" - susurró Badeba enfocando a la puerta que apareció

"Detectados seres vivos, detectada... anatomía humanoide...". "Ausencia de toxinas aéreas, gases respirables, proporciones adecuadas...". "Detectados seres vivos, detectada... anatomía humanoide...". "Ausencia de toxinas aéreas, gases respirables, proporciones adecuadas..." - Dijo una voz metálica desde el otro lado de la apertura. De ella salió un sujeto con un traje parecido a un traje de astronauta, con una caja en las manos.

En su escondite, los campistas vieron la salida del individuo, nunca habían visto algo así mas que en fotos, vídeos documentales o exposiciones; era tecnología antigua, de hacía al menos tres siglos, y nunca se había desarrollado en este mundo desde la Llegada.

El extraño manipuló la caja y de ella surgió una burbuja sólo formada por aire volviéndose sólido, que ascendió unos pocos centímetros y empezó a crecer, al principio lentamente hasta rodear la nave. Entonces se agrandó rápidamente atravesando todo lo que había a su paso.

Las plataformas de documentación cayeron, haciendo añicos el suelo de cristal negro. Los que estaban en el suelo se quedaron paralizados unos segundos.

"Anuladas fuerzas geomagnéticas locales en un radio de tres kilómetros, tiempo estimado de duración: diez horas" - dijo la voz metálica de la caja.



En el campamento, Griane y Anura acababan de ser atravesadas por la extraña onda, tres segundos después oyeron a sus espaldas un ruido parecido a una explosión. Unos cuantos segundos más tarde, cuando consiguieron moverse, miraron hacía el sitio del que parecía haber venido el ruido. Una nube de polvo flotaba sobre el suelo.

"¿Qué ha pasado?¿Qué es eso?" - dijo Anura.

"No lo sé, pero allí ha caído algo, desde que llegó esa cosa han pasado muchas plataformas..." - Griane recogió su bolsa - "Vamos, puede haber alguien herido." - y empezó a andar hacia ese sitio. Anura la siguió.

23/8/07

Capítulo 4

"No deberíamos estar aquí, vamonos de vuelta a la ciudad, deberíamos dejar a las patrullas de reconocimiento hacer su trabajo sin estorbar, ¡vámonos!"- dijo Griane, la primera campista.

"No estamos haciendo nada, sólo observamos, desde que acampamos no haces más que repetir lo aburrido que es el bosque desde el suelo, y ahora que ocurre algo más emocionante ¿quieres irte?"- preguntó Kear.

"Sí"- contestó.

"Vas a tener que aguantarte, sólo quieres irte tú, si no, haber traido transporte"- espetó Balaro.

"Esto es alucinante... si pudiera grabar más de cerca..."- comentó Badeba absorta en la impactante imagen.

"Me quiero ir, ya, y no me traje transporte porque no me tocaba a mí..."- se quejó de nuevo Griane.

"Mira que cacharro más grande, y mira todo alrededor está negro, pero no hay humo, ni olor a quemado, ni calor, ni... ¡nada!"- dijo Dovén a Badeba - Todo está cristalizado...

Badeba enfocó a Dovén dando golpecitos al árbol medio cristalizado que tenía al lado.

"Pues yo me vuelvo a la tienda"- Decidió Griane - "Anura, ¿vienes?"

"Mmmm..." - Miró la escena y se giró a Griane - "Sí, vámonos..."



Se alejaron de los demás algo inquietas, lentamente, en silencio y mirando hacia atrás cada poco.
Lo demás estaban hipnotizados con la escena que cada vez constaba de más participantes.

No tardaron más de veinte minutos en llegar al campamento, Griane empezó a recoger sus cosas en ese mismo instante.

"¿Por qué tenías tantas ganas de volver?, ¿no sentías curiosidad?" - preguntó Anura.

"No, no tengo un buen presentimiento y me quiero ir de aquí..." - paró un momento de recoger y se volvió a Anura, que estaba mirando hacia el lugar del que habían venido - "Y si tenías curiosidad, ¿por qué no te has quedado?"

Anura la miró pensativa: "No se, no me pareció bien dejar que volvieras sola, y si pasa algo interesante Badeba lo grabará y nos los enseñará. Además, quedándonos todos allí seguro que alguien de las patrullas nos ve y nos manda de vuelta."

Griane siguió recogiendo y Anura empezó a hacerlo también.

Un ligero zumbido les llamó la atención, parecía provenir de la zona de la esfera. Al mirar, vieron cómo el aire parecía formar una onda sólida que se aproximaba hacia ellas a toda velocidad, atravesándolas, dejándoles una sensación de rigidez.

22/8/07

Capítulo 3

"Detectados seres vivos, detectada... anatomía humanoide..."- señaló el escáner apuntando hacia la apertura. - "Ausencia de toxinas aéreas, gases respirables, proporciones adecuadas..."

A través de la inesperada puerta pasó un ser vestido con un traje de protección. Llevaba en sus manos una caja, que parecía ser algún tipo de instrumento. Estaba de pie parado, esperando que su vista se adaptara al cambio de luminosidad.

En la ciudad iban recibiendo audio y vídeo de la situación. Vieron salir a la criatura. Tras unos segundos manipuló lo que llevaba en las manos y de pronto la imagen desapareció y a través de los altavoces se empezó a escuchar estática.

En la Sala del Concilio seguían con atención todos los acontecimientos, pero su preocupación aumentó cuando dejaron de recibir la señal.

La Sala del Concilio era el lugar donde se gobernaba la nación, todas las decisiones concernientes a leyes, política y justicia se tomaban allí. Dicho gobierno estaba formado por un grupo de diez individuos elegidos por el pueblo, para mantener y proteger su vida.

Pero en esta situación, ninguno de ellos sabía cómo actuar, sólo uno tenía idea de lo que podía estar pasando.

14/6/07

Capítulo 2

La alarma se activó en la base de protección más cercana. No era lo habitual, no existía un protocolo para esta situación. Nunca antes había sucedido nada igual, al menos que alguien recordara o hubiera constancia en los archivos; así que tras la confusión inicial se enviaron dos patrullas de reconocimiento especiales.

Las patrullas de reconocimiento especiales eran las enviadas normalmente en situaciones en las que no se conoce la magnitud exacta de la emergencia, aunque siempre estaban preparadas para lo peor. Llevaban equipos sanitarios avanzados, trajes de seguridad ignífugos, cámaras de cuarentena...

Los levitadores estaban listos prácticamente desde que detectaron el suceso, sólo faltaba la aprobación para la actuación por parte del consejo. No tardaron mucho en decidirse, pues los miembros querían intervenir pronto para prevenir posibles peligros en la pacífica existencia de su ciudad.

No tardaron en llegar, sobrevolando una primera vez toda la zona para enviar una valoración de la situación; era algo que realmente nunca antes habían visto y por lo tanto decidieron que no sabían si sería necesario más equipo. Descendieron para ver el objeto más de cerca y comprobar si necesitarían refuerzos.

Mientras bajaban a tierra observaron en qué estado habían quedado los árboles, todo el perímetro circular que se había formado se encontraba carbonizado, y justo en el centro, a diez metros del borde había una esfera de color blanco enorme de unos cien metros de diámetro medio hundida en el suelo.

Se acercó a pie un pequeño grupo mientras los demás descargaban el material y pedían refuerzos acorde con la situación.

Cuando uno de los que se acercaron tocó la nave, a unos centímetros de su mano salió un chorro de vapor a presión e instintivamente dio un salto hacia atrás. Al mirar el chorro se dio cuenta de que tenía forma rectangular y que estaba haciendo sobresalir lo que parecía una puerta.

La estructura rectangular se deslizó hacia arriba, dejando el borde inferior a ras de suelo, y una entrada a lo que parecía un pasillo sin iluminación alguna.